
Finally kissing Beefcake Pablo Empezamos en el sofá, pero enseguida nos pasamos a la cama; era más cómodo y, seamos sinceros, necesitábamos espacio. Pablo se puso muy cachondo, me sujetaba las piernas y me follaba con hambre. Podía sentir cómo le gustaba, y eso sólo lo hacía mejor.
Por fin ocurrió: por fin estaba besando a Pablo el Fortachón. Fue suave, sexy y sorprendentemente dulce. Había estado esperando ese momento, y cuando llegó, me sentí tan bien.
Pero el calor no se detuvo ahí. Me di la vuelta, me puse a cuatro patas y le di acceso completo a este hombre sexy. Su ritmo, la profundidad… todo era perfecto. Después de otra ronda de sexo oral, me dio una carga espesa y deliciosa, y sí, su semen sabía muy bien, cazadores.
Este encuentro tuvo un poco de todo: risas, conexión, creatividad y una follada muy caliente. No lo olvidaré y me encanta compartirlo con vosotros. Disfrutad de esta sesión inolvidable, Finalmente besando a Beefcake Pablo